D&I 2015, compartiendo experiencias sobre diversidad e integración.
La creciente importancia que las empresas otorgan a la gestión de la diversidad queda patente día a día en la proliferación de eventos sobre este tema. Aunque en España aún no están tan extendidos como en otros países los encuentros de profesionales para tratar de dilucidar cómo extraer el máximo provecho de la diversidad en el contexto empresarial, los congresos, simposios y actos de todo tipo centrados en la diversidad empiezan a ser habituales.
El congreso comenzó con una mesa general titulada Diversidad y la Gestión de la Diversidad. En ella se demostró el valor añadido que aporta la gestión de la diversidad a empresa, tanto en la mejora de aspectos relativos al desarrollo organizacional como, por supuesto, al capital humano. También se incidió en los beneficios de la diversidad sobre el reconocimiento e imagen corporativa y en la considerable mejora de las oportunidades del mercado. En este sentido, y tal y como resume Helena Valderas, responsable de talento, movilidad y diversidad de AXA Seguros, “la diversidad nos acerca a nuestro cliente, atrae y retiene talento diverso e inclusivo y nos ayuda a desarrollar nuevos productos para nuevos nichos de mercado”.
La ponencia vivencial titulada El Líder “Diverso”. Gestión de Equipos de alto rendimiento fue particularmente interesante, abordándose en ella las enormes dificultades que plantea la gestión de equipos de trabajo y poniendo de manifiesto la necesidad de contar con líderes diversos. Posteriormente se trató la diversidad como ventaja competitiva, concluyéndose que la mezcla de talentos, procedencias y habilidades genera mayor conocimiento y liderazgo en la empresa. A continuación, pudimos conocer una experiencia práctica llevada a cabo por el BBVA, que ha creado un Comité de Diversidad.
La tercera mesa de debate trató sobre la innovación en diversidad, en ella salieron a relucir conclusiones tan interesantes como que la generación de calidad está asociada a la diversidad y no a la homogeneidad. En la última mesa de debate se habló sobre la gestión de la diversidad desde la perspectiva de género. La principal conclusión de esta mesa fue la necesidad de fomentar una cultura de la corresponsabilidad que equipare las oportunidades y produzca un reparto equilibrado de espacios personales y profesionales para conseguir grandes beneficios para las empresas. El evento concluyó con una nueva experiencia práctica sobre el papel de los comités de diversidad y conciliación, mostrándose la necesidad del equilibrio entre la vida personal y profesional.
Este congreso es uno de los varios que, como decimos, van prodigándose cada vez con más asiduidad en nuestro país y que ponen de manifiesto la importancia de la gestión de la diversidad, constituyéndose en espacios para compartir experiencias y buenas prácticas empresariales. Ya a principios de este año, concretamente en febrero de 2015, el Congreso de Responsabilidad Social en Zaragoza reunió durante dos jornadas no solo a empresas sino a responsables de la administración pública que, entre las reflexiones que aparecen en el dossier final del congreso, concluyeron que “la diversidad es un valor que enriquece y que ofrece oportunidades para mejorar la gestión y la resolución de problemas y constituye uno de los pilares básicos de los comportamientos socialmente responsables de las empresas”.
